La actividad del puerto de Eivissa durante los primeros diez meses del año superó con amplitud la media balear, que en algunos aspectos incluso decrece, según informó ayer en rueda de prensa el presidente de la Autoritat Portuària, Francesc Triay, tras la celebración del Consell de Navegació i Port d'Eivissa, en el que participan las instituciones, empresas y estamentos oficiales vinculados a esa instalación. El mayor aumento se experimentó en el transporte de materiales de construcción, que subió un 22 por ciento respecto a 2000, un dato que, según recalcó Triay, refleja la actividad económica que se ha desarrollado en la isla y que contrasta con el bajón del 11 por ciento registrado en los otros cuatro puertos que gestiona la Autoritat Portuària.
En mercancías también ha crecido un seis por ciento la actividad, un punto por encima de Balears. Ese porcentaje aumenta hasta el 11 por ciento si se tiene en cuenta sólo el contenido neto; en este caso también se hace más grande la diferencia con el resto de las islas, hasta alcanzar el siete por ciento.
En total, la actividad aumentó un seis por ciento, cinco puntos más que en los demás puertos. Sin embargo, decreció el número de pasajeros (de cabotaje) un dos por ciento en relación a hace un año, aunque esa disminución no fue tan acentuada como en otras zonas: la media balear es muy superior, de un ocho por ciento.