El despacho de Pilar Costa, presidenta del Consell Insular, ofreció ayer una imagen inusual, única en lo que va de legislatura, la de todos los alcaldes de las Pitiüses sentados a la misma mesa para discutir temas de interés general. Costa no había convocado hasta ahora un encuentro de estas características y lo hizo ayer ante la inminente presentación del borrador del Plan Territorial Insular (PTI), prevista para el próximo mes de diciembre.
El Consell no oculta que es imprescindible que para que dicha herramienta de ordenación del territorio, la de mayor rango en el ámbito de Eivissa y Formentera, salga adelante habrá que intentar dejar a un lado «las diferencias de color político» y, por ello, Costa pidió ayer a los alcaldes que tengan «una visión más institucional, de mucha más altura política». Y, para contribuir al clima de diálogo, reconoció que era probable que Consell y consistorios no hubieran tenido hasta el momento «el diálogo que se reclamaba desde algunos ayuntamientos».
Sin embargo, ayer se mostró satisfecha por el clima del encuentro y por la «voluntad colaboradora» manifestada por todas las partes, hasta el punto de que se acordó convocar encuentros monográficos para aquellos temas que requieren un análisis más pormenorizado.
En relación con el tema territorial, el alcalde de Sant Antoni explicó que aún es pronto para saber cómo avanzarán las negociaciones del PTI porque la documentación que actualmente existe sobre la materia es poca. Sin embargo, ya anunció que su municipio no está de acuerdo con algunos de los acuerdos adoptados hasta el momento, especialmente con el hecho de que zonas consolidadas no sean consideradas como urbanas. Y no es un problema ajeno a otros municipios, como posteriormente confirmaron otros alcaldes.
Otro de los temas que se trató en el encuentro, que se prolongó durante más de hora y media, fue el de la posible mancomunación de determinados servicios.