El paisaje de Santa Agnès permanece inalterado pese a la notable mejora que la llegada de la electricidad ha supuesto para 65 familias de la zona. La presidenta del Consell Insular, Pilar Costa, como representante de una de las instituciones que ha financiado el proyecto de electrificación soterrada, visitó ayer la zona acompañada por la consellera de Medi Ambient, Fanny Tur; el presidente de la Asociación de Vecinos, Joan Sureda, y el director del proyecto, el ingeniero Manel Domènech.
La llegada de la electricidad no ha sido tarea fácil, pero tampoco barata. La subvención de 111.187'24 euros (18'5 millones de pesetas) otorgada por el Consell se ha completado con otros 129.217'6 euros (21'5 millones de pesetas) otorgados por el Ayuntamiento de Sant Antoni y otros 180.303'63 euros (30 millones) procedentes de la Unión Europa y administrados por el Govern balear. Aun así, cada propietario ha tenido que abonar, al menos, 7.813'16 euros (1'3 millones de pesetas), aunque la lejanía de cada vivienda ha hecho encarecer más el precio.
El Consell, según explicaron ayer Costa y Tur, ya ha recibido nuevas peticiones de subvención por parte de esta asociación de vecinos y, como en las ayudas se da prioridad a los territorios protegidos, es más que probable que se siga colaborando con esta tarea. «Es muy difícil mostrar lo que no se ve, pero habría que hacer un esfuerzo por imaginar cómo sería este paisaje si las líneas no estuvieran soterradas», reflexionó Pilar Costa.