El Instituto Balear de Saneamiento (Ibasan) ha adjudicado a Infilco el suministro de los equipos de desodorización del edificio de pretratamiento de la estación depuradora de aguas residuales (Edar) de Eivissa, de cuyo mantenimiento y funcionamiento se ocupa, precisamente, esa empresa. El importe de la adjudicación ha sido de 398.000 euros (unos 66 millones de pesetas) y se contempla dentro de las actuaciones emprendidas por el Ibasan para intentar acabar, o al menos reducir, el hedor que produce esa instalación.
Según explicó el director territorial del Ibasan, Ramon Mayol, se trata de unos aparatos «de última generación tecnológica» que sustituirán a las torres que «hacían las funciones de desodorización con carbono» en la planta de pretratamiento, foco del 85 por ciento de los malos olores. Precisamente, Ramon Mayol se reunió ayer con los vecinos de la avenida 8 d'Agost para explicarles las medidas que se llevarán a cabo próximamente para mejorar el funcionamiento de esa Edar, auténtico quebradero de cabeza tanto para los residentes de la zona como para quienes la gestionan.
El director territorial les avanzó la instalación de los equipos así como las obras de mejora que se ejecutarán en la planta de pretratamiento para que quede hermética. Aunque actualmente se encuentra abierta de par en par para poder entrar en ella con vehículos, los operarios no solían cerrarla debido a la peligrosa (e incómoda) acumulación de gases en su interior, circunstancia que provocaba la emisión de malos olores al exterior que desde hace años perturba la vida de los vecinos.
Mayol explicó a los representantes de los vecinos que no se desplazará la depuradora a otra ubicación porque esa operación sería muy costosa, e indicó que en colaboración con el Ayuntamiento se elaborará un estudio para determinar en qué zonas de la ciudad se genera un exceso de gas sulfhídrico, lugares donde se aplicarán sustancias químicas para evitar que el agua llegue en ese estado a la depuradora.