Los ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea acordaron en la cumbre de Palma, que finalizó ayer, dar «absoluta prioridad» a la Directiva sobre responsabilidad civil medio ambiental, con el objetivo de garantizar que los daños producidos al suelo puedan ser resarcidos. Así se pronunció el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, en la rueda de prensa que ofreció junto a la comisaria de Medio Ambiente, Margot Wallstron, para dar a conocer las conclusiones alcanzadas en dos días de reuniones en la capital balear. El marco común para la protección de los suelos debe incluir, según esas conclusiones, «los principios de prevención, cautela y del quien contamina paga para hacer frente a los procesos de degradación de este recurso esencial, puesto que los daños al suelo son frecuentemente irreversibles».
Estas cuestiones podrían alcanzar la categoría de «acuerdo formal» en la última reunión del Consejo de Ministros que se celebrará bajo la presidencia española el próximo mes de junio en Luxemburgo. Según dijo Matas, «el uso de la responsabilidad medioambiental es un medio muy importante para garantizar la prevención y para consolidar un comportamiento más respetuoso con el medio ambiente». Según quedó de manifiesto en la segunda reunión de carácter informal desarrollada por los ministros de Medio Ambiente de los Quince, la UE completará su legislación ambiental con una política comunitaria de protección integrada de la calidad de los suelos. Matas dijo al respecto: «De esta manera, la presidencia española (en la UE) da un impulso definitivo para que la Comunidad Europea ponga en marcha acciones para conservar este recurso esencial para la vida».
«Esta es la primera vez», añadió, «que se aborda en una reunión de alto nivel un tema de tanta relevancia como la protección de nuestros suelos». En ese contexto, la Comunicación elaborada por la Comisión Europea «Hacia una estrategia temática para la protección del suelo» sirvió a los ministros comunitarios de base para la discusión y para las futuras acciones comunitarias en la materia, que se pondrán de manifiesto en las próximas reuniones de Bali y Johannesburgo. Los ministros, asimismo, subrayaron en el encuentro de Palma la necesidad de proteger los suelos de la UE de una manera integrada, es decir, teniendo en cuenta su uso sostenible y los beneficios que puede conllevar para el agua, el aire, la lucha contra el cambio climático y la diversidad biológica. Este enfoque global, reiteraron, está en la misma línea de otras políticas articuladas por la UE con el objetivo de proteger el medio ambiente en su conjunto.