Las depuradoras de la isla de Eivissa produjeron el pasado año 7'9 hectómetros cúbicos de agua depurada mediante el sistema terciario, es decir, apta para volver a ser utilizada para determinado tipo de cultivos o para el riego de césped. Comparada con el agua tratada en 1998 (0'61 hectómetros), el aumento ha sido significativo, del 1.195 por ciento, notablemente superior al experimentado en las otras islas de Balears.
Así, en Mallorca se ha pasado de 7'93 hectómetros cúbicos hace cuatro años, a 11'28 en 2001 (un aumento del 42 por ciento), y en Menorca de 3'52 hectómetros cúbicos a 6'31 el pasado ejercicio. En total, en Balears se somete al tratamiento terciario 25'5 hectómetros cúbicos de aguas depuradas, más del doble que en 1998 (12'06 hectómetros).
De las diez depuradoras del Ibasan en Eivissa, sólo cuatro disponen de tratamiento terciario (una sólo en 1998). Todas esas instalaciones produjeron 9'8 hectómetros cúbicos de agua el pasado año, de los que alrededor del 80 por ciento fueron depurados mediante ese tratamiento.
Hace cuatro años, el caudal depurado de forma terciaria representaba únicamente el 7'26 por ciento del total, que era 8'4 hectómetros cúbicos. En Mallorca era el 55'30 por ciento de lo que se producía, mientras que en Menorca era el 69 por ciento del total depurado. En Formentera todo sigue igual que en 1998: no hay depuración terciaria, de manera que la producción es cero, aunque se generan 0'41 hectómetros cúbicos al año de agua residual depurada.
De las cuatro instalaciones que realizan el tratamiento terciario del agua residual, en dos se hace por eliminación de nutrientes, en una por filtración y en la cuarta mediante el sistema de osmosis inversa.