Realizar un diagnóstico de la salud ambiental del municipio, planificar medidas para paliar los problemas medioambientales concretos y, finalmente, implicar a los residentes en el municipio de forma que coparticipen con las administraciones locales para que las medidas sean efectivas. Estos son los objetivos de la Comisión Interinsular de Eivissa y Formentera de la Agenda 21 de Balears, que quedó constituida ayer de manera formal en el Consell Insular.
Este organismo dependerá de la Comisión Balear de Medio Ambiente y «coordinará las iniciativas de las agendas 21 de los ayuntamientos para darles soporte técnico y económico».
La comisión pitiusa es la primera que se constituye en Balears. Su misión inicial será recibir los diagnósticos ambientales que se realicen en los ayuntamientos de las Pitiüses para, a continuación, plantear sugerencias sobre las iniciativas que se deben poner en marcha para mejorar las condiciones medioambientales.
La puesta en marcha de estas medidas responde a las directrices de la cumbre mundial sobre medioambiente de Río de Janeiro, que se celebró hace diez años. Así lo explicó ayer la consellera de Medi Ambient, Fanny Tur, quien será la encargada de coordinar esta comisión que contará además con representantes de los ayuntamientos de Eivissa, San Antoni y Formentera y del Govern balear.
En representación de la Administración balear acudió al acto de constitución oficial el director general de Residus, Nicolau Barceló, quien resaltó que «la integración de temas ambientales es la mejor forma de garantizar un futuro sostenible». En concreto, esta Comisión Interinsular revisará los planes de acción y seguimiento de los ayuntamientos e informará a la comisión balear sobre la validación de las agendas.