Mientras que la nieve ha sido la protagonista de las últimas horas en toda la península, en Eivissa la atención ha recaído sobre las lluvias, con una media de 30 litros por metro cuadrado recogidas entre las 00,00 horas y las 18,00 de ayer; y los vientos, que registraron rachas puntuales en zonas abiertas de 90 kilómetros por hora en dirección nordeste. Paraguas rotos, vegetación dañada, comunicaciones marítimas afectadas y el aumento del uso de calefactores, calienta camas y ropas de abrigo son las consecuencias más inmediatas del temporal.
Las temperaturas han experimentado un descenso significativo aunque moderado si se atiende a las previsiones anteriores. De todos modos continuará la bajada y es posible que a partir de mañana se registren máximas de 10 grados centígrados con temperaturas más frías durante la noche. Los vientos, la lluvia (en algunos casos aguanieve y granizo) y las tormentas puntuales permanecerán hoy sobre las Pitiüses.
La constancia de las precipitaciones que se comenzaron a registrar a las 00,00 horas de ayer y fueron continuas durante todo el día, dejaron a su paso inundaciones y problemas para el tráfico rodado. Por un lado, los charcos y el desbordamiento de alcantarillados fueron una constante ayer, sobre todo en la zona de Talamanca de Eivissa y las cercanías del paseo marítimos. Por otra parte varios vehículos sufrieron patinazos provocados por la película de agua sobre la calzada y la presencia de manchas de aceite que en contacto con la lluvia se vuelven más resbaladizas.
En este sentido la Guardia Civil de Tráfico señaló a EFE que ninguna carretera ha sido cortada por lluvia o nieve y que sólo se han registrado algunos accidentes leves de circulación y vuelcos, como los que aparecen en esta página. En lo que respecta al resto del archipiélago, el Instituto Nacional de Meteorología (INM) prevé cielos nubosos o muy nubosos con precipitaciones débiles o moderadas, que pueden ir acompañadas de tormenta con granizo y ser de nieve por encima de los 500 metros.