J. M. R.
Las provincias integradas en el grupo de insularidad de la
asociación Arc Llatí apuestan por «favorecer el desarrollo del
sector de la informática» para contrarrestar y superar la
«situación de monocultivo turístico», según se subraya en la
«Declaración de Nuoro», resultado de la última reunión mantenida
por la agrupación en la isla de Cerdeña y a la que ha tenido acceso
este periódico.
En ese encuentro, que se celebró en la localidad italiana de Nuoro los días 23 y 24 de enero pasados, participó el vicepresidente del Consell, Vicent Tur, en representación de las Pitiüses. Eivissa ostenta la presidencia del grupo de insularidad, mientras que la organizadora del evento en Cerdeña se hace cargo de la vicepresidencia.
La propuesta de fomentar las nuevas tecnologías en las islas tiene como objeto conseguir en un futuro próximo que la economía no dependa exclusivamente del turismo. El grupo quiere que las islas se conviertan en el Silicon Valley del Mediterráneo, si bien sus integrantes son conscientes de que el reto será imposible de lograr si desde los estados centrales no se favorece y abarata el transporte con el Continente.
En la «Declaración de Nuoro» se hace hincapié en que es «imprescindible» para el desarrollo crear «corredores» entre la zona continental, las islas y Àfrica del Norte para «garantizar de forma eficaz la continuidad territorial en términos de oferta y de tarifas y para estrechar lazos con los países africanos de la orilla oeste del Mediterráneo». El grupo de islas de Arc Llatí apuesta por crear un proyecto dirigido a la «racionalización del sistema de transportes con miras a la creación de una red aérea eficaz», y por planificar «programas específicos de intervención para cada realidad insular».