Echoamano, escrito con la 'E' del revés, es una firma de
marroquinería y todo tipo de objetos y complementos en piel que
nació de la fusión profesional y personal de Olga Payró y Eduardo
Guevara en 1992. Cuando ha transcurrido más de un lustro desde
aquel mítico año, este dúo de artesanos de la piel continúa
trabajando en su taller de ses Salines buscando nuevas formas,
colores y acabados en sus diseños. «Trabajamos el cuero de becerro
de una manera totalmente artesanal para crear objetos situados en
la vanguardia de la moda», resume Eduardo, un argentino afincado en
Eivissa que, junto con Olga ha logrado hacerse un hueco entre un
público selecto y aficionado a lo exclusivo. «Una de nuestras
especialidades son los pedidos por encargo y los acabados
exclusivos. Cada vez es mayor el número de personas a las que le
gusta tener un bolso, cinturón o incluso las tapas de un book
personalizadas», explicó Olga, quien junto a su marido, ha
realizado todo tipo de encargos especiales: desde las tapas de una
agenda a un delantal a medida para un peluquero barcelonés con
distintos compartimentos en los que colocar las distintas tijeras,
peinetas y útiles y productos de trabajo. En estos momentos los dos
artesanos del cuero preparan la colección de verano en la que han
optado por canalizar su fusión de ideas hacia dos colecciones.
«Hacemos una línea exclusiva con cinturones y bolsos en los que se
combinan piedras semipreciosas, cristales, perlas y grabados de
diferentes formas, con una línea más asequible de complementos que
esta semana se presentarán en la Semana Internacional de la Moda de
Madrid con la firma Gloria Bendita», señaló Eduardo. El secreto del
éxito de este matrimonio está en la mezcla de estilos y en la
diversidad de fuentes de inspiración.
E.Estévez
Echoamano, curtidos de ideas
Olga Payró y Eduardo Guevara fusionan formas y diseños novedosos con el método tradicional de practicar la marroquinería