Formentera arropó a la familia del ex alcalde de Formentera Antoni Serra Colomar, que falleció el pasado jueves en Valencia a la edad de 66 años. Alrededor de 1.200 desfilaron por la capilla ardiente, instalada en el salón de plenos del Ayuntamiento, y el cementerio para dar el último adiós al que fue alcalde de Formentera durante los estertores de la dictadura y los primeros años de la democracia.
La capilla ardiente se instaló a las 17 horas, una hora más tarde de lo previsto, por el retraso del avión que trasladaba el féretro hasta Eivissa. Se formaron largas colas en la entrada del Ayuntamiento de personas que quería dar el pésame a la familia de Antoni Serra.
Los formenterenses estamparon su firma en memoria del difunto en un libro instalado en el Ayuntamiento. Antes de conducir el féretro hasta el cementerio, éste se traslado hasta la puerta de la iglesia de Sant Francesc, donde se leyó un responso, seguido por la multitud que llenó la plaza del municipio.