El Ayuntamiento de Eivissa compensará a los comerciantes de la calle Bartolomé Vicente Ramón por el perjuicio económico ocasionado por las obras de reforma de las aceras, que se prolongaron mucho más de lo previsto, con la mejora de la iluminación pública de la vía y la instalación de mobiliario comercial.
Las obras para cambiar las aceras de esta vía se iniciaron el 8 de noviembre del año pasado y no se acabaron hasta casi cuatro meses después, cuando la obra debía estar lista en poco más de dos semanas. A día de hoy aún restan por instalar la baldosas de dos de las esquinas de la calle y limpiar la arena y el polvo que aún queda del grueso de la obra. Los comerciantes lamentan que la demora, que coincidió con Navidad y el periodo de rebajas, ha supuesto una caída en las ventas de hasta un 30 por ciento. Por ello, ayer se reunió el técnico de la Asociación de Comercio de la Pimeef, Fernando Cobos, y algunos comerciantes con los concejales Antoni Roldán y Maurici Cuesta.
Los ediles del Pacte se comprometieron a realizar una serie de mejoras en la calle. Por un lado, mejorar la iluminación pública de la vía, con la instalación de nuevas farolas y aumentar la intensidad de los focos, y, por otro, instalar un opi (soporte publicitario de metacrilato) al principio y al final de la calle para insertar información sobre los comercios. También se instalarán dos opis en la calle Juan de Austria.
El Ayuntamiento también anunció ayer a los comerciantes que próximamente instalará en la calle soportes para aparcar bicicletas y que distribuirá los contenedores de basura por la zona para evitar la concentración en esta vía.