El pleno del Ayuntamiento de Eivissa dio la pasada semana el visto bueno al Plan de acción de la Agenda Local 21, una herramienta fundamental con la que el Consistorio pretende conseguir un modelo real de desarrollo sostenible para el municipio. Este documento define una serie de actuaciones ambientales, económicas y sociales que van desde el control periódico de la contaminación sonora hasta la promoción de las viviendas de alquiler. El Ayuntamiento, con el respaldo de todos los grupos políticos, aprobó además un Plan de participación y un programa de evaluación, seguimiento y difusión periódica de la Agenda 21.
Entre las propuestas de este texto que el Consistorio ya ha planificado para ponerlas en marcha en un plazo breve de tiempo está la de la creación de una comisión para el control del tráfico. Esta mesa reunirá, entre otros, a los concejales de Gobernación, Obras y Participación Ciudadana con la Policía local, asociaciones de vecinos, representantes del taxi, el transporte público y las autoescuelas. El objetivo del plan de actuación es conseguir reorganizar y controlar el tráfico, con el fin de solucionar los problemas de fluidez y de aparcamiento que afectan al municipio.
A parte, una de las actuaciones que la Agenda 21 de Eivissa establece como prioritaria es promover las certificaciones medioambientales entre las residencias turísticas del municipio mediante la rebaja de impuestos como, por ejemplo, el de la recogida de basuras o las tasas de alcantarillado. Se trata de un proyecto, para que el se establece un plazo aproximado de cuatro o cinco años, que pretende fomentar una oferta turística de calidad. Por otra parte, el documento contempla otras actuaciones prioritarias como la creación de un plan municipal de promoción de la energía solar térmica, que está presupuestado en torno a los 46.000 euros, o la evaluación del impacto de la contaminación que produce en su entorno la central térmica de Gesa, un proyecto que se calcula costará aproximadamente 45.000 euros.