La Comisión Insular de Patrimonio aprobó ayer con siete votos a favor, tres abstenciones y el voto en contra del conseller del PP, Joan Marí Tur Botja, declarar Bien de Interés Cultural (BIC) ses Feixes de es Pratet y Talamanca por su valor etnológico, lo que supone la protección de un área de más de 700.000 metros cuadrados. El acuerdo de la Comisión Insular de Patrimonio debe ser ratificado por el pleno del Consell Insular. La consellera insular de Cultura y Medi Ambient, Fanny Tur, aseguró ayer que seguramente la propuesta se incluirá en el orden del día del pleno que se celebrará el martes que viene. El área de protección comprende el sector 6 y las unidades de actuación 8, 12 y parte de la 13, calificadas como urbana, en el caso de es Pratet, y la totalidad del Prat de ses Monges, con una zona añadida por donde pasan los cuatro canales que garantizan el riego de la zona.
Una vez aprobada la declaración BIC, queda en suspenso cualquier actuación urbanística en las áreas urbanas (UA 8, 12 y 13) hasta la aprobación de un Plan Especial de ses Feixes, según explicó Tur. «Un BIC no desclasifica un suelo urbano, pero mientras no haya un Plan Especial aprobado no se pueden tramitar licencias ni llevar a cabo cualquier actuación urbanística», indicó la consellera. De las 35 alegaciones presentadas en contra de la protección de la zona, la Comisión Insular de Patrimonio, según explicó Fanny Tur, sólo aceptó dos y una parcialmente, pero que no afecta al perímetro de protección trazado. «Han aportado datos para perfilar algunos sectores. Hablamos de metros», aseguró.
La declaración BIC supone una protección patrimonial. Ahora, explicó la consellera, tras la aprobación en pleno, hay que dar el visto bueno a un Plan Especial (el Ayuntamiento ahora estudia una propuesta del Consell) que marcará lo que se puede hacer en ses Feixes. «El Plan General de Ordenación Urbana se tiene que adaptar a lo que diga el Plan Especial», dijo Fanny Tur. La propuesta presentada por el Consell establece una protección integral de la zona con la consiguiente desclasificación de las áreas urbanas. Cuando el Ayuntamiento apruebe el plan, éste deberá ser ratificado por la Comisión Insular de Patrimonio y la de Urbanismo.