El presidente de la Asociación de Concesionarios de la Zona Marítimo-Terrestre de la Pimeef, César Jerez, volvió ayer a pedir a la conselleria de Medi Ambient del Govern balear que recapacite y de marcha atrás en su decisión de recortar el número de hamacas en el Parque Natural de ses Salines. Después de reunirse con representantes de todos los concesionarios afectados, Jerez expuso su contrapropuesta que contempla la posibilidad de reducir el número de hamacas en un 25 por ciento en los meses bajos de la temporada turística, es decir, mayo y septiembre. «En junio, julio y agosto se tendría que mantener el mismo número de hamacas que en el 2002», añadió. Esta opción supondría, según el presidente de la asociación, que se retocase también el canon que se paga a los ayuntamientos por la explotación de este servicio.
Otra de las alternativas que los concesionarios ofrecieron a la conselleria de Medi Ambient es que esta temporada se mantengan las mismas tumbonas que en años anteriores, y que en los próximos meses haga un seguimiento de los servicios que se prestan en las playas del espacio protegido para que conozca de cerca esta realidad. La intención es que, después de hacer este control, representantes del Govern se sienten a negociar, a partir de septiembre, con los negocios afectados y los ayuntamientos para consensuar entre todos una solución para las próximas temporadas turísticas.
Jerez reiteró que los concesionarios están dispuestos a llegar a un acuerdo con la conselleria, aunque insistió en que hasta ahora «el Govern ha mantenido una actitud prepotente y no se ha mostrado abierta a negociar».