D.A.D/C.A./E.R.
De nuevo un resultado muy reñido y victoria para Xico Tarrés. Como
en 1999, el Ayuntamiento de Eivissa se decidió por un puñado de
votos, aunque en esta oportunidad la diferencia fue un poco más
holgada: 257 papeletas.
Fue la única alegría de la noche negra que ayer vivió el Pacte Progressista en las Pitiüses, que confiaba en el Ayuntamiento de Eivissa como un valor seguro en todas las apuestas, y que al final acabó salvando pero con gran sufrimiento. El Partido Popular, con una candidatura apañada en el último momento, logró poner en aprietos al favorito a lo largo de todo el escrutinio.
A pesar de todo,el Pacte Progressista consiguió casi 700 votos más que en los pasados comicios en los que compareció con Els Verds. Los verdes, por cierto,recibieron un fortísimo varapalo, ya que con 464 votos (la mitad que en 1995 cuando fueron en solitario) se quedaron como la cuarta fuerza más votada por detrás de un sorprendente ASI, que se hizo con 473 votos.
Tarrés renovó la alcaldía de Eivissa con una victoria ensombrecida por la debacle de los progresistas en el Consell: «Tenemos que tomar nota y trabajar para recuperar lo que se ha pedido. No sé que ha pasado. Si lo supiera corregiríamos muchas cosas. Tenemos que estar preparados con la misma humildad para ganar que para perder». Ante la cara de algunos compañeros por la caída del Pacte, aseguró que «hará sentir orgullosos a los que han votado al Pacte y que el gobierno de Eivissa sea de todos» y confió en que haya una colaboración entre las distintas instituciones pese a que sean de distinto color.
Por su parte, el candidato del PP, Joan Marí Tur, felicitó a Tarrés y aseguró no sentirse decepcionado. «Esperaba ganar, pero no ha podido ser. Seguiré trabajando desde la oposición para devolver a los ciudadanos que nos han votado la confianza que han depositado». Botja felicitó a Tarrés por teléfono nada más conocer los resultados.