Sin duda alguna la sensación de la noche del domingo tuvo nombre y apellidos. Pau Gasol, jugador de los Menphis Grizzlies en la NBA y el español que ha llegado más alto en edraft americano, apareció en la discoteca después de haber cenado en el restaurante del mismo local. El interés que despertó fue tal que el deportista llegó a sentirse agobiado y se refugió en la zona vip, reducto de famosos de todo tipo pero que cuenta con un punto a favor de los mortales, no estar cerrado a la vista. Los más avispados también vislumbraron de refilón a Andrea Casiraghi, hijo de Carolina de Mónaco y del malogrado piloto Stéfano Casiraghi. La fama de Andrea traspasa más fronteras que la de Gasol, pero la estatura del español le convirtió en blanco de muchas más miradas.
Miles de personas bailaron ansiosos al ritmo de clásicos como «Let it be», de The Beatles o «Road House Blues», de The Doors. Una de esas bailarinas insaciables fue la guapísima actriz Elsa Pataki, quien, en otro rincón de la zona vip, dejó pasar la noche junto a un grupo de amigos y su novio, Fonsi Nieto. Éste llegó, como aquel que dice, con la moto a cuestas y el trofeo en la mano, porque ese mismo día, pocas horas antes, compitió y ganó en el Gran Premio de Gran Bretaña de Donington Park, donde consiguió, en 250 c.c, su primera victoria de la temporada. El sobrino de Àngel Nieto rehusó, como es habitual en él por cláusulas de contrato, aparecer en la fotografía junto a su novia, con quien se ha comprado recientemente una casa en Eivissa. Elsa explicó que se trataba de una escapada fugaz de un día.
La cantante Silvia Superstar, del grupo 'Killer Barbies', mostró su atrevida imagen y contó que en breve presentarán su nuevo disco en España. Por su parte, el que fuese actor de 'Al salir de clase', Daniel Huarte, ahora cantante comentó que acaba de sacar el álbum «Nadie» y no descarta una posible actuación en Es Paradís. S. Y./E. E.