El sindicato UGT ha pedido a la Gerencia del hospital Can Misses la separación de los servicios de Pediatría y Neonatología, que cuenta con ocho camas y cuatro incubadoras, ante la situación creada «por la gran sobrecarga de trabajo en este servicio, añadido esto a la progresiva ampliación de las funciones que realizan tanto las enfermeras como auxiliares».
En opinión del sindicato, con la separación de la zona de las camas de niños con la de recién nacidos se podrá dotar «de forma eficiente, tanto a nivel de personal como de utillaje a cada una de estas secciones, mejorando de esta forma el servicio ofrecido a los ciudadanos».
Una de las razones argumentadas por el sindicato para pedir la separación de Pediatría y Neonatología es que ambas unidades no están juntas en otros hospitales, como el caso del hospital Son Dureta, pero la Gerencia de Can Misses opina que ambos centros no pueden se asemejan: «No se puede comparar el hospital de referencia con Can Misses», dijo el gerente del Àrea de Salud, Ignacio Martínez Jover.
El gerente descarta que se separen ambas unidades ni que haya un aumento de personal: «La carga de actividad no ha sufrido un cambio tan importante para que sea necesario hacer una modificación de la plantilla», aunque señaló que sí se refuerza en situaciones de más carga de trabajo de igual modo que otros servicios.
La Dirección de Enfermería mantuvo una reunión con el personal de Pediatría el pasado 6 de octubre donde expusieron sus reivindicaciones, pero no se llegó a ningún acuerdo. «Están convencidos de que están trabajando más y Enfermería propuso que se buscara un elemento de medida para las cargas de trabajo, ya que el que utiliza el hospital no les parece que recoja la realidad, pero no ha habido respuesta», explicó Martínez Jover.