El director general d'Arquitectura i Habitatge, Antonio Llamas, mantuvo ayer un encuentro con el presidente del Consell, Pere Palau. Con respecto a los altos precios que ha alcanzado la vivienda en Balears, Llamas aseguró que sólo una depresión económica importante, que descartó por el momento, «podría hacer caer de una manera notable el coste de los pisos». El director general descartó que exista una «burbuja inmobiliaria» que pueda «explotar» y hacer que bajen los precios de la vivienda en Balears.
Ante la evidencia de que la vivienda ha subido el doble de precio en Balears que en resto de la península desde 1998, Llamas puntualizó que no se trata de un fenómeno derivado de las políticas de las CC AA sino de factores macroeconómicos «como la alta demanda derivada de la alta inmigración». Aunque juzgó «difícil» reducir el precio de la vivienda, el director general aseguró que el Govern tomará «una batería de medidas para estabilizar el precio de la vivienda en Balears», actuaciones que pasan por la «optimización del suelo urbano aumentando los proyectos de rehabilitación».
Precisamente de rehabilitaciones, pero patrimoniales, habló ayer Llamas, que destacó que el Govern tiene en marcha subvenciones para la mejora del patrimonio de Eivissa «por un importe de unos 875.725 euros, que se corresponden con diez obras». El año que viene hay previstas dos intervenciones en dos edificios para rehabilitar, con una subvención del Govern de 133.800 euros. El motivo de la visita de ayer era también hacer un nuevo contacto con el Consorcio Patrimonio de la Humanidad en el que también participa el Govern. Hasta el momento se han pagado unos 375.000 euros. Eivissa se encuentra, además, dentro de un área de rehabilitación integrada en convenio con el Ministerio de Fomento. La intención del Govern es acelerar estas obras de rehabilitación que afectan a unas 121 viviendas. Llamas realizó una visita al casco antiguo para saber cuáles son las preferencias y problemas.