Sansón, el personaje bíblico que con su fuerza derribó un templo sobre los filisteos que dominaban a los israelitas ha sido el nombre que ha escogido el director de Sansón Projet, Frederic Sciamma, para un revolucionario afilador de cuchillos, herramientas y tijeras de cuyo montaje y empaquetado se van a encargar 25 jóvenes trabajadores de las Pitiüses afectados por el síndrome de Down .
La mujer de Frederic, Hana; sus padres, Michelle y Joe; y su primo Christophe, conforman la empresa familiar que se ha lanzado a esta aventura, aparentemente arriesgada, pero que cuenta con el aval de dos empresas que han hecho encargos importantes cuando la compañía todavía está en ciernes. La familia al completo reunió ayer en la sede de la empresa (en el polígono industrial de Montecristo) a los padres de los chicos y chicas con los que van a trabajar para presentarles el producto y resolver todas sus dudas. Juan y Caty, padres de Juanjo, un joven de 29 años que va a trabajar en la empresa se mostraban «felices». El padre reconocía ayer que, en un principio «la idea de que Juanjo cambiara de trabajo inquietaba un poco». Por ello se informó sobre la familia Sciamma. Su seriedad como encargados de la empresa Coffee Time de maquinaria de café, lo tranquilizó. Herminia, madre de Iván, de 19 años juzgó de «maravillosa» la «fe y la alegría en el proyecto que ha puesto esta familia», dijo.