El Ayuntamiento de Sant Antoni rechaza que el Plan Territorial Insular (PTI) ponga límites al desarrollo urbanístico de ses Variades, donde el Grupo de Empresas Matutes, proyecta construir un puerto deportivo. En su escrito de alegaciones al PTI, el Consistorio demanda que se excluya el límite de 60 habitantes por hectárea previsto por el Plan de Ordenación de la Oferta Turística (POOT). «Pedimos que se elimine, puesto que el PTI, que tiene el mismo rango que el POOT, puede hacerlo», justificó ayer a este periódico el alcalde de Sant Antoni, José Sala.
El alcalde advirtió de que, en ningún caso, «prejuzgamos que deba haber más habitantes por hectárea», puntualizando que el límite marcado podría condicionar el desarrollo urbanístico más conveniente para la zona. Asimismo, el Consistorio también solicita que el PTI no imponga que el 50 por ciento de esta zona se destine a espacios libres de carácter público. En su lugar, Sala cree más acertado que diga que «sólo el 50 por ciento de los terrenos pueden ser de carácter lucrativo». «De lo contrario», dice el alcalde, «se pierde la posibilidad de construir equipamientos».
El PTI ha recalificado el sector de ses Variades al amparo de la ley de medidas urgentes de ordenación del territorio aprobada hace unos meses por el PP en el Parlament balear. Este sector fue desclasificado por las Directrices de Ordenación del Territorio (DOT) del anterior gobierno del PP de Jaume Matas en 1999. El PTI también da vía libre a la construcción de un puerto deportivo, que condicionará el desarrollo urbanístico de la zona.
Por otra parte, el conseller executiu d'Ordenació del Territori, José Torres, informó ayer a este periódico que el periodo de exposición pública del PTI culminó ayer con la recogida de más de mil alegaciones presentadas por ciudadanos, instituciones y distintas entidades de la isla. Por la mañana se había registrado la entrada de más de un millar de alegaciones, por lo que se esperaba que hasta el cierre del plazo (20 horas de la tarde) hubiera un «importante aumento» de la cifra.
Torres puntualizó que aún sigue abierto el calendario de reuniones con la oposición y otros colectivos para incluir cambios en el texto definitivo del PTI. Los técnicos del Consell deben ahora estudiar y contestar a cada una de las alegaciones recibidas, lo que condicionará el plazo para la aprobación definitiva del plan territorial. Por ello, el conseller elude hablar de previsiones. Además, el Consell también está a la espera de recibir los informes de otras instituciones, como la Demarcación de Costas o la Conselleria de Medi Ambient.