Diez kilómetros recorridos entre Sant Rafel y Sant Antoni. Más de 600 senderistas y una recaudación de 19.019 euros (un 50 por ciento más que el pasado año) son los resultados de la segunda edición de la 'Ruta Solidaria' que ayer llegó a su punto y final con la celebración de una torrada en el Passeig de ses Fonts de Sant Antoni y que la concejala de Participación Ciudadana y Bienestar Social, Lydia Prats, valoró de «muy positiva y mucha emoción por la gran participación y la dedicación». La iglesia de Sant Rafel fue el marco elegido para iniciar el último trayecto de la ruta, gracias, en parte, al buen tiempo que les acompañó durante toda la jornada. Tras cerca de tres horas por los parajes naturales, los participantes se dispusieron a recuperar fuerzas en el paseo de Sant Antoni a la vez que disfrutaban de la música de 'Los Corleone', entre otros grupos.
«Hoy ha sido mucho menos cansado que el recorrido de ayer, porque el sendero era mucho más llano y la mitad de corto», comentaba una de las participantes, motivo por el que la participación aumentó, sumándose al recorrido un centenar de discapacitados. Asimismo, la buena organización y el compañerismo entre los senderistas fueron otros aspectos destacados por muchos de los participantes, que sin duda volverán a participar como un grupo de amigos que reclamaban más actividades: «Deberían organizarse más excursiones porque la gente se lo pasa muy bien».
Desde dibujos realizados por los alumnos hasta la exposición de alfombras, cuadros y otras manualidades, sin olvidarse de la degustación de los pasteles realizados por los padres de los discapacitados fueron algunas de las actividades que albergaba el paseo. La segunda edición de la 'Ruta Solidaria' se prolongó hasta bien entrada la tarde.