Los extranjeros que residen en Eivissa han de hacer cola desde la cinco de la mañana en la Comisaría de Eivissa para poder ser atendidos. A partir de las 8,30 se empiezan a repartir los números en las dependencias de atención al público pero desde tres horas antes, muchos de ellos, aguardan a la intemperie para poder realizar sus gestiones con la administración. Esta peculiar situación se viene produciendo desde hace varias semanas. «Están desde las cinco de la mañana primero para pedir cita y luego esperan toda la mañana a que les atiendan», protestan desde el colectivo uruguayo.
Las quejas por las colas también han llegado hasta la Plataforma por la Convivencia, que atribuye este hecho al inicio de vacaciones de trabajadores de temporada, muchos de ellos extranjeros que han de ir hasta Comisaría para solicitar los permisos de regreso en el caso de que se desplacen fuera de la isla o para informarse sobre si se le ha concedido su permiso. En Eivissa y Formentera se calcula que puede haber entre 500 y 800 personas extracomunitarias en situación no regularizada.
La situación de las colas no afecta sólo a la población extracomunitaria sino también a los europeos. En Comisaría hay una cola de atención al público para españoles y otra para extranjeros.
El director insular de la Administración General del Estado, José Manuel Bar, reconoció que «se ha detectado una cierta saturación en estos últimos días y las colas están siendo mayores», superiores a hace un mes. Bar explicó que esta situación se debe a un problema de personal «que se está intentando solucionar lo más rápidamente posible». Actualmente hay unas ocho vacantes sin cubrir en Comisaría al coincidir una serie de circunstancias: finalización de contratos temporales, personal de vacaciones y bajas.