El PP sacó a relucir en el pleno del Ayuntamiento de Eivissa de esta semana algunos de los datos más llamativos que recoge la memoria de secretaría del año pasado y que reflejan, según la oposición, que la gestión del equipo de gobierno «empeoró» en 2003 con respecto a 2002. La portavoz del grupo popular, Virtudes Marí, criticó, entre otras cosas, que «si en 2002 el PP denunciaba que un 30 por ciento de las licencias de apertura solicitadas no se habían resuelto, en 2003 esta cifra se incrementó hasta un 41 por ciento».
Para la oposición también «fue peor la gestión del ejecutivo local en relación a hacer cumplir las ordenanzas municipales». Marí destacó el llamativo descenso de las denuncias por ruidos tramitadas por la Policía Local que pasaron de algo más de 500 en 2002 a 230 el año pasado. Las denuncias por tráfico en 2003, 8.767, bajaron en torno a un 17 por ciento. Asimismo, los servicios de retirada de vehículos de la grúa realizados el año pasado, 5.863, se redujeron en 217 en comparación a 2002. Marí se refirió también al apartado del documento que se refiere a 'otras denuncias de las ordenanzas municipales', en las que se enmarcan sobre todo las de medio ambiente, y en las que también se aprecia una bajada muy considerable, pasando de 996 en 2002 a sólo 83 el año pasado, es decir 913 menos. Todos estos datos demuestran, según Marí, que «la mala organización de la Policía Local hace que el rendimiento sea muy bajo».
Por otra parte, el grupo popular criticó que el año pasado sólo se reuniera dos veces la comisión de gobierno del Ayuntamiento (cuatro en 2002) cuando tendría que haberlo hecho en 24 ocasiones, y lamentó que no se hubiera convocado ni una sola vez en doce meses la comisión de participación ciudadana. La portavoz de la oposición lamentó además que tanto en licencias de obras como en disciplina urbanística «no se pueda saber realmente los expedientes abiertos por la administración municipal en 2003 ya que sólo se especifica en el informe los permisos que se otorgaron y los que se denegaron pero no los que quedan sobre la mesa».
Marí concluyó sus críticas asegurando que el informe de secretaría demuestra que el gobierno progresista «trabaja menos o trabaja peor».