El portavoz del equipo de gobierno, Joan Marí Tur, alabó en su turno de palabra «la modélica gestión» del presidente, así como su «trabajo, honestidad y eficacia». Marí Tur ensalzó en su discurso la figura de su jefe, al que describió como «un hombre bueno, agradecido y trabajador», lo cual, según dijo, «hace que los ibicencos y formenterenses podamos estar tranquilos porque el Consell, bajo su presidencia, está dando soluciones a tanta ineficacia e incompetencia de su predecesora».
Marí Tur enumeró 18 problemas de las Pitiüses solucionados o en vías de ello por el gobierno insular del PP. Arrancó con la inseguridad jurídica heredada y consiguiente aprobación del PTI para terminar en su larga enumeración de problemas con la falta de residencias para mayores. «Señor presidente con vuestro empuje vamos progresando cada día, pero aún podemos hacer más por estas islas. Con usted al frente, Eivissa y Formentera están viviendo un tiempo de prosperidad económica y paz social», dijo.
En su alabanza al 'jefe', Marí Tur aseguró que «sólo los políticos de peso toman decisiones valientes, basadas en la legalidad y en la voluntad de servir a las mayorías». El portavoz del equipo de gobierno y también conseller de Patrimoni aprovechó su turno para colar en el discurso preparado un largo apunte sobre la polémica suscitada estos días por la demolición de las tumbas romanas halladas en el segundo cinturón de ronda para que prosigan las obras.
Marí Tur también tuvo palabras de reproche hacia el talante del anterior gobierno del Pacte: «Qué lejos quedan aquellos insultos que escuchábamos cuando estábamos en la oposición cuando se nos gritaba que no hablábamos sino que bramábamos». Por su parte, el presidente Palau agradeció avergonzado «las palabras de alabanza» de los suyos y les animó a seguir trabajando con la misma intensidad.