El conseller de Presidencia, José Sala, afirmó ayer en respuesta a las recomendaciones del Colegio Oficial de Arquitectos en torno a la urbanización de Vista Alegre, en sa Caixota, que ahora ya, por el grado de consolidación urbanística de la zona, es «imposible convertirla en un parque verde». El presidente del colectivo de arquitectos de las Pitiüses, Antoni Marí, manifestó el jueves a este periódico la conveniencia de que, «por sentido común», sa Caixota pase a ser «inedificable» en la revisión del planeamiento urbanístico de Sant Josep.
Sala aseguró que «la opinión sobre lo deseable es muy respetable, pero que en el caso de sa Caixota hay lo que hay». El conseller de Presidencia hizo estas declaraciones en una rueda de prensa posterior al pleno celebrado ayer, en el que el PP evitó tratar una moción de urgencia presentada por el Pacte. En concreto, los progresistas proponían al equipo de gobierno que, por un lado, se revisara el Plan Territorial Insular (PTI) para evitar el desarrollo urbanístico de la montaña, y por otro, que, entre otras cosas, la institución presentara una denuncia ante los Juzgados para depurar responsabilidades.
José Sala aseguró inicialmente en el pleno que, pese a desconocer el contenido de la moción del Pacte, no tenía inconveniente alguno en discutirlo. Apuntó antes, eso sí, que el Consell no tiene competencias para intervenir directamente en el derrumbe, al tiempo que aseguró que «la actuación desarrollada por el Ayuntamiento es correcta». El PP se abstuvo a la hora de votar la urgencia del debate de la propuesta y el Pacte se llevó una sorpresa mayúscula cuando la secretaria de la Corporación advirtió acto seguido que era necesaria la mayoría absoluta para que la propuesta de urgencia del debate prosperase. «Nos hemos abstenido pensando que la moción se trataría, pero reglamentariamente vemos que no es posible», justificó el presidente Pere Palau, que, ante la estupefacción de la portavoz del Pacte, Pilar Costa, propuso incluso «repetir la votación», propuesta que de repente quedó en nada con un contundente: «Pasemos al siguiente punto».