Pete Doherty, cantante y guitarrista del grupo Babyshambles, ofreció el pasado viernes por la noche una nueva actuación semanas después de que lo pudiéramos ver en los conciertos que organiza la discoteca Privilege. En esta ocasión fue en el bar M de Sant Antoni de Portmany. El carismático Doherty no sólo destacó por su música sino por su actitud ante un entregado público, en su mayoría inglés, que disfrutó con las canciones de su ídolo. Hubo momentos de especial intensidad, hasta el punto que el cantante rompió en varias ocasiones alguna cuerda de su guitarra, aunque el culmen llegó cuando la emprendió a golpes con el equipo de sonido, el cual destrozó. Doherty continúa así con su leyenda de problemático dentro y fuera de los escenarios. Es uno de los personajes preferidos de la prensa sensacionalista inglesa, en la cual ha tenido un lugar importante a mediados de esta semana al ser publicadas unas fotos de su novia, la modelo Kate Moss, preparando y consumiendo cocaína. Un nuevo lío para una pareja que ya ha sido fotografiada en otras situaciones que han sido motivo de escándalo. Además, las instantáneas han llegado días después de que la top mode ganara su batalla al «Sunday Mirror» por calumnias e injurias, dado que el periódico británico publicó una exclusiva en la que aseguraba que la joven había estado en coma por consumir drogas durante una visita a Barcelona en 2001.
La leyenda de Doherty y Moss como personas no gratas no hace más que crecer. Cabe recordar que durante su última visita a las Pitiüses, en cuyas playas Kate disfruta durante algunos de sus descansos, la pareja tuvo algún que otro problema para encontrar alojamiento debido a que muchos propietarios se negaron a arrendarles sus inmuebles. R.D.