La actividad del matadero ha aumentado notablemente en el último año, con un incremento en el sacrificio de cabezas del 46'7 por ciento, pasando de 5.911 en 2004 a 8.674 en 2005. Estos datos suponen una recuperación de la producción cárnica propia de la isla, aunque aún sigue por debajo de los valores de mediados y finales de los 90, cuando por las manos del matarife pasaban en un año al menos 11.000 cabezas.
Esta subida pone freno a un periodo de recesión de seis años, con una caída del 45 por ciento desde 1999 hasta 2004. En sólo un año se ha recuperado la producción perdida en este largo periodo. Esta subida se debe principalmente a la actividad llevada a cabo por la empresa Carnes March S.L. que el año pasado decidió poner en práctica una nueva estrategia empresarial, comprando corderos de la península para engordarlos y sacrificarlos en la isla, en lugar de adquirir directamente la carne de fuera. Según el presidente de la mancomunidad del matadero, Vicent Torres, la actividad de esta empresa, que a su vez comercializa la producción en carnicerías propias de la isla, ha supuesto un impulso importante a la actividad del matadero en relación al balance de los últimos años.
Precisamente, el aumento más importante se registra en el sacrificio de corderos, que en apenas un año ha pasado de 4.219 cabezas en 2004 a 6.780 en 2005 lo que supone una subida del 60'7 por ciento. También se ha registrado un incremento en el sacrificio de cerdos, pasando de 849 a 1.052 (un 23 por ciento más). Sin embargo, baja la producción de carne de vaca y buey, pero con escasas diferencias. Por municipios aumenta notablemente el sacrificio de corderos procedentes de Sant Antoni, pasando de 741, en 2004, a 3.520, mientras que en el resto las diferencias no son tan significativas. Asimismo, este año, dado el incremento de la actividad, se ha incluido a los matarifes en plantilla con la idea, además, de impulsar aún más la producción. También está pendiente para este año la apertura de una línea para el sacrificio de conejos.