El presidente de la Asociación de Productos Avícolas de Eivissa, Juan Planells, asegura que es prácticamente «impensable» que, en el caso de que el virus de la gripe aviar llegase a la isla portada por alguna ave salvaje, éste pudiera afectar a alguna de las granjas de la isla. «No digo que pueda llegar a zonas como ses Salines, pero es muy difícil que llegue a una de las granjas. Es casi impensable», indicó.
Planells recuerda que por ahora no ha hecho falta aplicar ninguna medida especial por el hecho de que los pollos están encerrados en corrales, aislados del exterior. En la isla hay cuatro grandes productores de pollos, con un total de entre 3.000 y 6.000 aves.
Planells asegura que las ventas no han bajado. La actividad del matadero tampoco ha variado. De todos modos, el presidente de la asociación de productores de aves expresa su preocupación de un posible decremento de la comercialización de pollos a causa de la alarma generada. «Una circunstancia como ésta es muy desfavorable», dice Planells, quien comprende «la actitud autodefensiva de las personas». «La gente tiene algo de miedo», dice Planells.
Lamenta que buena parte de la población no esté bien informada, aparte de la influencia que ejercen los medios de comunicación. «Se da una información muy alarmista», dijo Planells, quien destacó por encima de todo que en el caso de que la gripe llegase a una de las granjas el consumidor no correría peligro alguno, sino aquella persona que trabajase con las aves. «La gripe aviar se contagia por las vías respiratorias. Se podría coger un ave afectada cocerla y comerla tranquilamente según tengo entendido», señaló Planells.
Por su parte, la actividad de la línea exclusiva de pollos del matadero se redujo el año pasado en un 17 por ciento, pasando de 50.230, en 2004, a 41.820 sacrificios. El presidente de la mancomunidad del matadero, Vicent Torres, achaca este descenso a «cuestiones del mercado» y descarta que se deba al temor por la gripe aviar. El sector teme que este año pueda ser más complicado debido a la alarma infundada, a su entender, que se ha creado con la posible llegada del virus a España.
La Conselleria d'Agricultura reconoce que en los últimos días se ha constatado que la gente de Eivissa que cría aves en casa está «nerviosa» a causa del avance del virus de la gripe aviar. Se han recibido muchas llamadas de personas preguntando si deben sacrificar sus animales. La Conselleria ha transmitido «un mensaje tranquilizador» porque «no hay peligro» y apunta acto seguido que «los ánimos se han calmado un poco». Últimamente la Policía Local de los municipios recibe muchos avisos de la aparición de aves muertas. La alarma ha tenido mucha más trascendencia en Mallorca donde han aparecido aves sacrificadas o abandonadas.