Pere Marí Torres y Antoni Tur Ferrer, 'Toni Xica', recibieron ayer emocionados la Medalla d'Or de les Illes Balears, la más alta distinción que concede el Govern, de manos de su presidente, Jaume Matas, en el solemne acto que se celebró ayer en el Recinto Ferial de Eivissa en los actos institucionales organizados con motivo del Dia de les Illes Balears.
«Hoy es un día muy agradable porque durante mi vida me he dedicado a hacer algo que me gusta, a mejorar el bienestar de las personas que me necesitaban», confesaba ayer Pere Marí después de recibir esta distinción que se le concede como impulsor del movimiento asociativo y promotor de múltiples iniciativas dirigidas a incrementar la calidad de vida de las personas mayores de las Pitiüses.
El actual presidente de la Federación de Mayores de Eivissa destacó, además, en su intervención «el nivel de asociacionismo, que se ha conseguido como nunca, con la ayuda de las instituciones». Marí, que brindó la Medalla d'Or a los socios y a los clubes de jubilados «que me han ayudado», no olvidó tampoco a su mujer, Catalina, al recibir este galardón por parte del presidente del Govern, Jaume Matas: «La recibo yo, pero hay una persona que está detrás de esto, mi mujer Catalina», precisó.
Antoni Tur Ferrer, 'Toni Xica', también tuvo presente a su familia al recibir este premio, «a mi mujer que no ha podido venir, por razones de salud, y a mis hijos» - expresó su agradecimiento a la institución autonómica «porque nunca había pensado en recibir este premio». Tur Ferrer, un hombre que se ha caracterizado por un talante amable, conciliador y moderado, recordó en su intervención que uno de sus logros ha sido «conseguir un instituto para Formentera». Toni 'Xica', que durante un cuarto de siglo fue titular del Juzgado de Paz de Formentera, recordó ayer que escribió una carta al Rey «explicando el problema y ahora tenemos el instituto Marc Ferrer, que celebró el 25 aniversario el año pasado». Tur Ferrer recibió esta distinción en reconocimiento a su admirable implicación en la sociedad civil de Formentera a la cual ha proyectado su espíritu cordial y accesible y ha invertido toda una vida de dedicación.
La concesión de la Medalla d'Or de les Illes Balears, que en la edición de 2006 ha recaido en dos pitiusos, obedece a la voluntad de homenajear a los ciudadanos ilustres de Balears y de reconocer públicamente los méritos en los que han sobresalido, como también el deseo de ensalzar ante todos los valores que les han caracterizado y la actitud del servicio a nuestra tierra desde los lugares más diversos de las islas.