El instituto de Sant Agustí se convirtió ayer, además de en una gran fiesta, en un escaparate de las tendencias que más pegan entre la juventud. Pantalones anchos y gorras, cinturones de colores y camisetas para enseñar los hombros son los complementos con los que se adornan hoy en día la mayoría de los adolescentes, que se pirran por la música rap, por los graffitis y por los tatuajes de henna. Pero la fiesta del «Dia del Centre» que todos los años celebra el IES Sant Agustí fue mucho más que eso. Fue todo un acontecimiento en el que los alumnos pudieron disfrutar de competiciones deportivas, de torneos de ajedrez y sudoku, de talleres de graffitis y de henna y de una gincana, entre muchas otras actividades. No faltó la música, con la actuación del grupo The Truth, formado por estudiantes del centro que tocan versiones de rock alternativo y con la que fue una de las actividades estrella: un concierto de rap intercultural a cargo de los alumnos, que demostraron ayer llevar el ritmo en la sangre y tener mucha inventiva a la hora de crear letras. «Esta era una propuesta de los alumnos y no se había hecho ningún año», explica el director del centro, Vicent Cardona, que añade que estas celebraciones suelen tener siempre un cariz intercultural, porque en el instituto conviven chicos de más de 20 nacionalidades diferentes. Esto explica el que hubiera canciones en idiomas como inglés, árabe, portugués u holandés. Y desde luego el concierto gustó muchísimo a un entregado público que, con manos en alto, siguió el ritmo con entusiasmo, con canciones algunas de desamor -«esta va dedicada a esa señorita de ahí, que se llama Virginia»- y otras más combativas, como una en la que se criticaba la construcción de la isla y de las autovías.
La jornada festiva también incluyó plantación de árboles, pase de películas, un taller para hacer velas que impartió un padre y una degustación de comida intercultural. C. Roig