R. L.
El Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN) denuncia la destrucción de casi 20 metros de una canalización de agua del siglo XVIII, «la única que hay en Eivissa», como consecuencia de las obras del desdoblamiento del segundo cinturón de ronda. Los ecologistas aseguran que esté conducto o mina portaba el agua a la que fue durante muchos años, hasta 1928 en concreto, la única fuente de la ciudad en la actual plaza de Canalejas más conocida como plaza de sa Font.
Este conducto de agua se ubica en el mismo punto donde, según el GEN, la constructora también arrasó un tramo de 20 metros de un acueducto romano. Explica el GEN que esta obra hidráulica canalizaba el agua desde el torrente de Can Mosson, en el interior de la isla, hasta la fuente de la Marina en Eivissa. Este tipo de obra se conoce como «mina de agua» debido a la forma de su construcción, con la excavación de pozos desde los cuales se perforaban una galería en el subsuelo.
El perfil de la mina tenía en principio unas dimensiones suficientes (60-80 centímetros de amplitud y 1,6-1,8 metros de altura) de modo que pudiera entrar un hombre para hacer revisiones periódicas. El GEN india que la existencia de esta galería está documentada en diversas publicaciones, principalmente las de Mossèn Joan Marí Cardona. El grupo ecologista lamenta que estas obras se hayan llevado por delante dos construcciones hidráulicas del patrimonio histórico de la isla. Dice que ampliará la denuncia presentada en los Juzgados sobre las destrucciones del Patrimonio.