El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Sant Antoni ha remitido esta semana al Consell una carta en la que informan de las deficiencias en cuanto a accesibilidad que presentan las aceras que se están construyendo en la autovía Eivissa-Sant Antoni a la altura de Can Tomàs. Esta misiva recoge un acuerdo tomado en el seno de la comisión de medio ambiente por unanimidad. «La acera es estrecha y no queda mucho espacio para los viandantes, en la carta además recordamos que en los barrios de la zona viven alrededor de 5.000 personas y hay muchos que van andando», explicó el concejal de Medi Ambient, José Ramon Serra.
La portavoz del Pacte, Laura Carrascosa, criticó hace pocos días este error, aunque según el primer teniente de alcalde de Sant Antoni, Joan Pantaleoni, el Ayuntamiento lleva haciendo gestiones respecto a este tema desde hace un mes. «Esta denuncia del Pacte no tiene demasiado sentido y parece que responde más a las ganas de tener presencia mediática», explicó Pantaleoni , que cuando detectó el problema contactó con el director de obra. «Como no me pareció demasiado satisfactoria la respuesta se lo comuniqué al alcalde, que se puso en contacto con el Govern», explicó el concejal, que añadió que posteriormente el ingeniero de la carretera reconoció que las aceras no eran correctas.«Él se justificó diciendo que en principio no se preveían árboles», aclaró. En cualquier caso, Sant Antoni obtuvo el compromiso de que se arreglaría para garantizar el paso de personas en sillas de rueda.