El juzgado de paz de Sant Josep ha fijado para el 23 de enero un juicio de faltas contra cuatro antiautopistas que pararon las máquinas de la UTE Accesos Ibiza, empresa adjudicataria de las obras de la autovía al aeropuerto. Según fuentes de la Plataforma Antiautopista, este juicio responde a una denuncia interpuesta en su día por el encargado de la empresa por unos hechos que ocurrieron en Can Malalt el 20 de febrero de 2006.
Hay cuatro personas citadas para este juicio a las que se acusa de una falta de coacciones. Dos de ellos supuestamente son los propietarios de Can Malalt, aunque los nombres no coinciden. Las otras dos son personas que se pusieron delante de las máquinas y cuya documentación fue requerida por las fuerzas policiales. En la denuncia también se habla de un grupo de antiautopistas concentrados para parar las máquinas ese mismo día, aunque sólo se acusa a estas cuatro personas. Fuentes de la Plataforma Antiautopistas recuerdan que hasta la fecha todos los acusados de obstaculizar el trabajo de la empresa han acabado absueltos excepto un activista, que fue condenado a pagar una multa de alrededor de cien euros. De hecho, los acusados de este juicio que se celebrará en Sant Josep se enfrentan a una multa de cuantía similar.
Desde la Plataforma Antiautopista también indican que hay otro procedimiento abierto en los Juzgados de Eivissa, en este caso contra 21 personas que pararon las máquinas en la zona de Can Sifre el día que se destruyó la carretera. Para este caso todavía no se ha fijado fecha para el juicio, aunque también podría ser que se archivase, ya que las faltas prescriben a los seis meses y los hechos se produjeron el 7 de marzo.
No sería la primera vez que se archiva una causa contra los activistas. De hecho, a principios del verano se dio carpetazo al macrojuicio contra activistas de la Plataforma, en el que se acusaba a más de 40 personas por una falta de coacciones.