«Se está produciendo una muy esperada transicion democrática, la estaca ha comenzado a caer y personajes aparentemente intocables han sufrido las consecuencias de su prepotencia y sus maneras de hacer e incluso están escuchando voces críticas en el seno de su formación», dijo Prats, quien, igual que Abascal, aseguró mostrarse sorprendido por la «madurez política» de los ibicencos, que incluso han votado diferente a una institución u otra, lo que constituye «una muestra de análisis, de pensamiento crítico y de voto selectivo». «Esto quiere decir que el ciudadano de Eivissa cada vez se da más cuenta de que hay elementos sumamente importantes en la isla que hay que preservar, entre ellos el territorio, las personas, la calidad de vida y los intereses generales», añadió Abascal.
De todas formas, en el PSOE-Eivissa pel Canvi son «conscientes» de que el resultado ha sido muy ajustado y que sólo se ha ganado por 38 votos, lo que «supone un grado de responsabilidad mayor». Por ello quieren transmitir un mensaje de «tranquilidad» y anuncian que lo primero que harán tras tomar posesión es reunirse con todos los colectivos «para escucharles». «Trabajaremos mucho, no decepcionaremos a los ciudadanos».
Entre las primeras ideas transmitidas por Tarrés a sus conselleres es que no hay que perder de vista que gobiernan gracias a la confianza de los ciudadanos, a los que «hay que escuchar». Por ello se tratará por igual a «todos los municipios», intentando llevar a cabo «políticas que beneficien a toda la ciudadanía». Prats cree asimismo que la fórmula PSOE-ExC ha funcionado muy bien durante la campaña, una unión que se convertirá «en una opción de gobierno ágil, coordinada, eficiente y ejecutiva». Para el número tres, la clave de los buenos resultados ha sido la ilusión, la serenidad ante los ataques y el rechazo a las políticas del PP.