Formentera tiene previsto instalar un dispositivo de control en el acceso rodado a Illetes a partir del próximo miércoles primero de agosto. Hasta el momento el control lo ejercían tres personas contratadas por el Ayuntamiento de Formentera que se limitaban a informar a los turistas sobre la prohibición de aparcar en el camino de acceso a Illetes desde el estrechamiento que se produce antes del Molí de Sal hasta el final del camino, frente al restaurante es Ministre, a excepción de las zonas habilitadas a tal efecto, y cerrar el acceso cuando los aparcamientos estaban llenos.
Días atrás, Jaume Ferrer lamentaba que aunque se comenzó a hablar del dispositivo de control antes de que se creara el nuevo equipo de gobierno del Consistorio, con el traspaso de poderes de uno a otro equipo en la Conselleria de Medi Ambient del Ejecutivo Autonómico, y el cambio en la dirección del ParcNatural de ses Salines, el protocolo de actuación y la contratación de personal, que debía haberse efectuado a principios de julio, se había retrasado más de lo previsto.
Ahora, Medi Ambient, a través de Biodiversidad, ha seleccionado tres personas que este fin de semana llegarán a Formentera y aún se espera que en una segunda convocatoria urgente este mismo fin de semana se contraten dos trabajadores más para que los efectivos sean ocho en total, circunstancia que se concretará el próximo lunes.
La responsable de Medi Ambient del Consell de Formentera, Silvia Tur, explicó que la caseta informativa se ha instalado en el camino de acceso al Parc Natural, en la parte más ancha y mucho más cerca de la carretera, en sa Ferreria Vella aproximadamente, ya que antes estaba situaba a la altura del Molí de Sal; el Parc Natural facilitará los uniformes y el material preciso para que los trabajadores desarrollen su tarea informativa y el Ayuntamiento/Consell instalará señalización indicando que se puede aparcar en el lado izquierdo de la vía y siempre estacionando los coches en batería. Cuando los aparcamientos estén llenos se impedirá el paso de vehículos y «dos minubuses, uno de la compañía Autocares Paya y el otro de Pitiusa Sur, trasladarán a los visitantes hasta el final de la playa de Illetes y al Tanga, en Llevant»,señaló Silvia Tur para añadir que «las dos empresas de autobuses de la islas han asumido el compromiso de este transporte alternativo que garantiza el acceso tanto de los turistas como de los vehículos de emergencia en todo momento».
Los trabajadores dispondrán de caseta de vigilancia o marquesina para protegerse del sol y cuando los aparcamientos estén completos cerrarán el acceso a Illetes permitiendo únicamente el paso de los minibuses, vehículos de emergencia y personas a pie, aunque su misión es informar y aconsejar pero no podrán sancionar, por lo que su trabajo será árduo. Tur recordó que «es una experiencia piloto, sobre todo por la inclusión de dos minibuses que harán de lanzadera desde el punto de control y las playas de Llevant e Illetes» y ya se piensa que de resultar positiva se ampliaría de cara al próximo verano sin descartar la posibilidad de utilizar minibuses ecológicos por tratarse de un espacio protegido.