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Antich y el Bloc alcanzan acuerdos sobre la ley que prevé construir viviendas en rústico

Carbonero garantiza que no se rectificarán terrenos y que sólo se recurrirá a los que iban a ser urbanizables

TORRES BLASCO/JUAN MESTRE

Los partidos del Bloc (PSM, Esquerra Unida y Els Verds) han aceptado la «filosofía» de la proyecto de ley que impulsa el conseller Jaume Carbonero para construir viviendas protegidas y pisos tasados.

Tanto el president Antich, que a lo largo de la sesión plenaria que se celebró ayer mantuvo diversos encuentros con el portavoz del Bloc Biel Barceló, como el conseller Carbonero dejaron claro que «no habrá recalificación de suelo rústico» y que sólo se echará mano de terrenos urbanizables y rústicos en transición que, básicamente, son ya urbanizables.

Además, y esa fue una de las reclamaciones incorporadas al proyecto a petición de Francina Armengol, todo se hará de acuerdo con los planes territoriales y el Consell.

Todavía no hay fecha para aprobar esta ley, de la que este diario informaba el pasado sábado, pero las negociaciones van por buen camino. Antich lo comprobó ayer. Además de reunirse con representantes del Bloc lo hizo con Bartomeu Vicens y Maria Antònia Munar. Ahora se produce un hecho curioso: mientras el PSOE baraja recurrir a suelo que técnicamente aún es rústico, los populares rechazan esta posibilidad.

Precisamente ayer, el Parlament aprobó ayer por unanimidad la propuesta del PP de instar al Govern a elaborar un proyecto de ley del suelo con la participación del sector inmobiliario y con el máximo acuerdo político posible. Asimismo, la Cámara legislativa apoyó la propuesta del PP para que las autoridades autonómicas tengan la última palabra cuando se proponga la ampliación de los aeropuertos de Balears. El resto de puntos de la moción fueron rechazados.

Durante el debate, el diputado del PP Jaume Font planteó que con el suelo urbanizable que hay disponible en Mallorca y que aparece en el plan territorial -más de ochocientas hectáreas- Antich podría lograr su objetivo de construir 20.000 viviendas sociales. El resto de grupos no se posicionó sobre el debate de construir viviendas sociales en suelo rústico y criticó la política territorial que había impulsado el Govern del PP.

Marian Suárez (Eivissa pel Canvi) acusó al PP de sarcasmo y de haberse convertido «en el paladín del suelo rústico» cuando, según destacó, los 'populares' crearon campos de golf con oferta complementaria, residencias secundarias y de otros usos en terrenos rústicos.

La nueva ley recogerá la filosofía de la Ley del Suelo estatal.

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