a comunidad musulmana de Santa Eulària inauguró ayer el primer festival marroquí que se organiza en la isla con el fin de mostrar distintos aspectos de este pueblo y de su cultura. Fue una jornada que contó con la visita de los vecinos del municipio y que espera atraer hoy a muchos más de toda la isla, para que puedan apreciar tanto los espectáculo en vivo, como la gastronomía, artesanía, música y proyecciones que allí se muestran sobre Marruecos.
«Esto me parece muy bien porque es una forma de integrarnos», aseguró Begoña, una residente valenciana que se dedicó a mirar en detalle los espejos, las comidas, los condimentos y utensilios que se ofrecen en el festival y que se combinan con una barra de té y dulces típicos que llevaron a la joven Hafida toda una semana de trabajo. Elaborados con almendras, azúcar, canela, musk y otros mil y un sabores, los dulces eran ofrecidos a precios populares por su marido Nouredin, residente en al isla desde hace 18 años. «Me gusta Eivissa porque aquí la gente es muy amable y además hay muchas personas como nosotros que son extranjeras. Aquí se vive bien», aseguró.
Los cantos sufíes inauguraron la mañana que continuó con la proyección de un documental sobre los aspectos tradicionales del país. «Al contrario de lo que se suele suponer aquí en Europa el Islam es muy alegre y esto se manifiesta en unos cantos sufíes que son una expresión genuina de la comunidad musulmana», explicó el mediador cultural de Santa Eulària, Saladí Costa Schreiner.
Por la tarde volvieron los cantos artísticos y espirituales, hubo sopa y pinchitos para degustar, y después llegaron las actuaciones de música en vivo con el grupo Gnawa Bania. «Va saliendo un poco todo sobre la marcha, vamos improvisando», explicaba Saladí sobre este primer encuentro que concluirá hoy con un nuevo calendario de actuaciones, gastronomía, música y proyecciones durante todo el día.
Por otra parte, como mediador cultural de Santa Eulària, Saladí tiene como proyecto proponer una mesa de diálogo interreligiosa. «Queremos demostrar que en el ámbito religioso también tenemos muchas más cosas que nos unen que las que nos separan. Tenemos al cura ortodoxo de Eivissa, a los anglicanos y a católicos y musulmanes que están interesados», destacó el mediador. lL. Aversa