El PSOE ha caducado el expediente disciplinario que abrió en su día a los seis militantes que dimitieron en bloque en enero de 2007 en desacuerdo por la elección de Lurdes Costa como candidata a la alcaldía de Vila. De estos seis afiliados, sólo quedan tres con carnet socialista, ya que dos de ellos, José Antonio Escobar y José Luis Rodríguez, dejaron de pagar las cuota y Estela López -hija de Roque López- se dio de baja en el partido. Los que sí siguen siendo miembros del PSOE son Carlos Rubio, Bernardo Escalona y Juan Gutiérrez. Los dos primeros declararon esta misma semana como testigos en el caso de las presuntas comisiones de Eivissa Centre.
La razón de que se haya habilitado de nuevo a estos militantes es que ha prescrito el expediente que se les abrió. De hecho, el expediente caducó ya durante el mes de febrero. Estas seis dimisiones se produjeron en enero de 2007 después de que la entonces secretaria general de la agrupación de Vila, Sandra Mayans, decidiera apoyar a Lurdes Costa como candidata a alcaldesa. Las renuncias salieron del sector Roque López, que hasta poco antes había apoyado a Mayans pero que interpretó como una traición su cambio de opinión. Estas dimisiones buscaban forzar la disolución de la ejecutiva de Vila, aunque no lo lograron ya que no consiguieron convencer al 50 por ciento necesario. Precisamente fue en ese momento cuando la secretaria general de Juventudes Socialistas, Irantzu Fernández, indicó que había recibido presiones de Carlos Fernández (ex secretario de Organización de la FSP-PSOE) para sumarse a estas dimisiones aludiendo a unas grabaciones comprometedoras.
Por otro lado se ha dado a conocer el censo de militantes que integran actualmente la FSP y que asciende a 507. Esta cifra es muy superior a los alrededor de 290 con los que contaba el partido en el congreso en el que salió elegido Roque López. La agrupación con mayor afiliación es la de Vila, que ha pasado de 98 a 244 en cuatro años. De hecho, esta agrupación ha incrementado su militancia en prácticamente 100 personas desde noviembre, cuando tenía 168. Muy importante también ha sido el aumento experimentado en Sant Joan, donde se ha pasado de 18 a 46. Sin embargo, Sant Josep tan sólo ha aumentado en dos, de 26 a 28. Santa Eulària pasa de 38 a 57, Sant Antoni de 32 a 54 y Formentera de 74 a 78. De esta forma, las agrupaciones que menos incrementan su afiliación son Formentera y Sant Josep.
La integrante de la gestora Patricia Abascal se mostró satisfecha con estos datos y atribuyó el aumento a los buenos resultados en las últimas elecciones locales y nacionales.