BÀRBARA MUNAR
El portavoz adjunto del Grupo Popular del Consell Insular, Vicent Serra, denunció ayer que las obras de la Residencia y Centro de día de Sant Antoni están paralizadas y que pese a que el PSOE-ExC «ha duplicado su equipo de gestión, no ha sabido continuar con las obras».
Los trabajos de la residencia se adjudicaron en enero del 2006 por un importe de 6.871.400 euros y un plazo de ejecución de 13 meses. En enero del 2007 el Consorci d'Infraestructures Sociosanitarias firmó con la empresa adjudicataria un modificado del proyecto inicial de la obra que incrementaba el coste en 1.056.644 euros. Seis meses más tarde, la empresa y el anterior equipo de gobierno firmaron un segundo modificado por un importe de 1.004.775 euros. Según la consellera de Política Sociosanitaria, Patricia Abascal, fue el 4 de julio, «cinco días antes del cambio de gobierno en el Consell». Pocos días después, cuando el nuevo Govern del Consell tomó posesión, la empresa «nos pidió 2.200.000 euros más» para finalizar las obras.
4 millones más cara
Si el presupuesto inicial de la obra eran cerca de siete millones, en dos años se ha incrementado en un 61 por ciento, 4.261.419 euros.
Abascal denunció ayer que toda esta situación se debe a la «mala herencia y a la pésima gestión del anterior gobierno» por «no haber sacado a concurso un proyecto con un presupuesto real» al que luego se le han realizado dos modificados. Serra explicó que el Partido Popular ya preveía que el presupuesto inicial se incrementaría para dar cabida a los posteriores modificados. «Fue una forma de gestión muy criticada por la oposición, pero con la que pusimos en marcha la residencia de Can Blai», destacó.
Desde el Consell han pedido explicaciones al anterior conseller responsable del área, Vicent Serra, para que explique «que interés tenía» firmar el segundo modificado con una aportación de más de un millón de euros con la empresa cinco días antes de dejar el cargo.
Además «si el cálculo realizado por Serra, fue el correcto, no se entiende como unos días después, con la llegada del nuevo equipo de Gobierno, la empresa pidiera un nuevo modificado de 2.200.000 euros».
Vicent Serra denunció ayer que la residencia de Sant Antoni no ha sido «nunca una prioridad para el actual Govern y para el Consell», al mismo tiempo que, evidenció que el retraso de las obras supondrá un «aumento de los precios que maneja la empresa». Por su parte, la Consellera de Política Sociosanitaria, Patricia Abascal, destacó ayer que el Consell ha estado trabajando desde el primer día y «hemos intentado en todo momento destinar lo menos posible para llevar a cabo la construcción de esta residencia». Por su parte, la consellera explicó que en el último año se han «sentado con la empresa en varias ocasiones para encontrar una fórmula de financiación», pero todavía no se ha llegado a ningún acuerdo porque la empresa «dice perder dinero con la obra». Por este motivo, Abascal dijo que si «en los próximos días no hay un acuerdo, acabaremos por rescindir el contrato porque no nos quedará más remedio», manifestó.
La primera piedra del complejo de infraestructuras sociosanitarias de Can Micolau des Molí se colocó el 14 de enero del 2006. Según el BOIB del 25 de octubre del 2005, el plazo de ejecución era de trece meses, de manera que las obras deberían haber acabado en febrero del 2007, durante el mandato del Partido Popular.
Una vez finalizada, la residencia tendrá capacidad para 94 personas internas, así como 30 plazas para el centro de día donde se acogerán a afectados que continúan viviendo en sus casas o con sus familiares. El edificio también contará con un centro de formación para personas con discapacidad que atenderá a quince alumnos.
Según los primeros planos, en el subterráneo se situarán los almacenes, la cocina y los vestuarios. En la planta baja estará el acceso al edificio y en la primera y segunda, se ubicarán las habitaciones de los internos.