Operarios de la empresa constructora de la autovía del aeropuerto empezaron ayer los trabajos para retirar la escultura que adorna la rotonda de Can Sifre, una actuación realizada a instancias de la Direcció General d'Obres Públiques del Govern «puesto que ese elemento, y las otras dos figuras ornamentales de la carretera de Sant Antoni, no figuran en los proyectos y fueron puestas por los constructores por decisión propia», explicaron desde el Govern. Las tres esculturas deberán ser retiradas «en breve» por los promotores de las obras y siempre antes de la entrega oficial de las carreteras.
Las piezas no forman parte del 1% del presupuesto de las obras que debe destinarse a iniciativas culturales. «Se ha encargado un informe para ver qué se hace con ese dinero pero cualquier actuación debe cumplir con el procedimiento», añadieron las mismas fuentes.