N
adie pone ya en duda que 2008 será recordado como el año de China. Tras la espectacular puesta en escena de la ceremonia de inauguración, son muchos los chinos que, alrededor del planeta, no querrán perderse semejante acontecimiento deportivo. Los Juegos Olímpicos han puesto a China en el centro del mundo. La polémica por la liberación del Tibet queda de momento aparcada para dar paso al espíritu universal del Olimpismo.
Los valores del sacrificio y del trabajo en equipo están muy arraigados en la cultura china. A pesar de esto muchos no podrán disfrutar todo lo que quisieran de las retransmisiones.
Todos reconocen sentirse muy orgullosos de los juegos que ha organizado su país y aseguran que harán todo tipo de esfuerzos para poder disfrutar de algunos minutos al día de sus deportes preferidos, ya sea por televisión o por internet. No dejarán de lado sus obligaciones laborales sino que apurarán al minuto para poder compaginar ambas actividades y contemplar el despliegue de medios que ha hecho su país para situarse en la primera linea del deporte mundial.
El viernes, toda la comunidad china paralizó su frenética actividad laboral para seguir en directo la ceremonia de inauguración de los juegos olímpicos. Muchos de ellos llevan viviendo en Eivissa más de una década, viven con su familia, tienen un trabajo estable y reconocen que aquí se sienten como en casa. A pesar de esto, no pueden disimular la emoción cuando recuerdan sus orígenes y todos desearían haber podido regresar a Pekín para poder presenciar en directo los Juegos.
Laura Tur