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En buena compañía

C

uando estaba estudiando en la península y venía de vacaciones a Eivissa aprovechaba para pasear a los perros. Ahora con el trabajo no vengo tanto, pero me escapo siempre que puedo», explicaba ayer Eladio Merino, un joven que acudió ayer al centro de recuperación de animales de Eivissa para sacar a pasear a algunos de los canes que viven allí. Como él, muchas personas deciden ocupar parte de su tiempo libre a esta labor: «En la actualidad tenemos una lista de 45 personas que vienen cuando pueden a colaborar con nosotros», afirmó Juan, trabajador de este centro municipal de animales. Este programa de voluntariado existe desde hace siete años, cuando se comenzó a impulsar por los beneficios que suponen para los animales: «Muchos de ellos llegan al centro con antecedentes de maltrato, por lo que están muy asustados. A otros no les han puesto la correa nunca y no saben lo que es salir a pasear. Con el trabajo de los voluntarios se consigue que los animales estén mucho más socializados para cuando llegue el momento y alguien los quiera adoptar. Se facilita, por tanto, la posterior adopción», afirmó Juan. En la actualidad este centro cuenta con 40 perros, aproximadamente, pero ha llegado a albergar en sus instalaciones a 90 y, salvo que sean peligrosos o tengan alguna enfermedad que se pueda contagiar a los humanos, no se sacrifican. Por ello las estancias en el centro se pueden prolongar durante mucho tiempo. Es aquí donde el trabajo de las voluntarios como Inés Roldán cobra mucha importancia: «Vengo a pasear perros desde junio, cuando acabé la carrera y decidí tomarme un verano más tranquilo, sin trabajar. Me enteré de que existía esta posibilidad y no me lo pensé porque me gustan mucho los animales», cuenta la joven, quien asegura que en su casa no tiene perros, pero sí su novio, que tiene cuatro.

Los voluntarios que acuden a pasear canes disponen de unas dos horas para hacerlo y pueden distribuir su tiempo paseando varios canes o uno solo: «La idea es aprovechar el tiempo con el mayor número posible, aunque siempre hay alguno al que le tienes un cariño especial. Personalmente, cada paseo dura unos 20 minutos, aproximadamente, porque así puedo saca a siete u ocho perros cada vez que vengo», explicó Inés.

María José Real

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