El intenso flujo inmigratorio de los últimos años -sobre todo por la llegada de mujeres en edad de procrear-, ha contribuido a retrasar en las Islas el proceso de envejecimiento que afecta, en general, a todos los países desarrollados. Pero, advierte el informe, el momento en que la pirámide se verá más afectada será cuando las generaciones nacidas entre 1960 y 1981 (baby boom) inicien la transición al grupo de gente mayor.
Y apunta que esta realidad plantea serios retos sociales, como son la sostenibilidad del sistema de pensiones y de la seguridad social, del mercado de trabajo y el incremento de la demanda sanitaria y social. Con respecto a esta última, el estudio sitúa a Balears por debajo de la media nacional en cuanto a recursos y cobertura de los servicios sociales. Así, por ejemplo, indica que el número de plazas para asistidos o dependientes de las Islas (que representan el 39,30% del total de 3.868 plazas residenciales) es más bajo que el de las plazas para válidos o no dependientes «lo que no sucede en ninguna otra comunidad».
Otros datos recogidos por el anuario son los siguientes:
Madres extranjeras. Las madres extranjeras son las que mantienen las tasas de natalidad por encima de la media. En 2007, una cuarta parte de los nacidos en las Islas (el 26%) tenía una madre extranjera.
Número de hijos por mujer. La media en las Islas en 2007 era de 1,382 hijos por mujer, prácticamente igual que la media nacional, pero es casi la mitad que en 1975, cuando la media era de 2,843 hijos por mujer.
Esperanza de vida. La esperanza de vida de los nacidos en Balears es de 80,46 años, con una diferencia notable entre sexos: 77,4 años para los hombres y 83,5 años para las mujeres, algo que se achaca a la mayor mortalidad masculina en edades más jóvenes. Entre los residentes de 65 años hay actualmente siete hombres por cada diez mujeres y esta diferencia aumenta a medida que avanza la edad, así a los 85 años hay 4,7 hombres por cada diez mujeres.
Causas de defunción. Las causas de defunción entre los mayores de 65 años son superponibles a las de la población general y la primera de todas es la enfermedad vascular o cardiocirculatoria.
Dependencia y edad. En Balears se confirma, como en las demás autonomías, el aumento de la dependencia con la edad. La franja de edad de 65 a 74 años representa el 35,84% de la discapacidad. Para los mayores de 75 años, el valor es del 64,16%. Por sexos, los hombres de Balears tendrían 6,5 años de vida con discapacidad y las mujeres, 7.
Red social. De cada 100 mayores de 65 años, 25 reciben algún tipo de ayuda de su familia, lo que confirma que en las Islas aún existe una red social fuerte, sobre todo en los pueblos.