Bancos y cajas de ahorros de las Islas están potenciando al máximo el uso de los cajeros automáticos, con el fin de agilizar los servicios bancarios y evitar las colas en las ventanillas de atención directa, todo ello enfocado, según las entidades financieras, para ofrecer el mejor servicio.
El objetivo a cubrir en los próximos años es incrementar las operaciones de autoservicio, gracias al uso de las nuevas tecnologías. Las entidades financieras que operan en Balears coincidenen en señalar que las operaciones que se han trasladado a los cajeros automáticos, «también pueden hacerse en ventanilla, pero está claro que no podemos controlar la actitud o mala gestión de algún empleado, que propicia las quejas de los usuarios por desviarlos a los cajeros automáticos, cuando en realidad puede ofrecer dicho servicio en ventanilla».
Puntualizando que en ventanilla se ofrecen todos los servicios bancarios, en estos momentos en los cajeros automáticos se pueden realizar diversas operaciones, que se van a ir incrementando a medida que se vaya generalizando el uso de las nuevas tecnologías entre los consumidores.
Las operaciones en los cajeros, que varían según las entidades, son las siguientes: obtención de contraseñas olvidadas de banca online o telefónica; compra de entradas; recarga de tarjeta telefónica o bono de transporte; recarga de tarjeta monedero; ingreso de dinero en la cuenta mediante un sobre, normalmente proporcionado por el propio cajero, en el que introduce el dinero en billetes o un cheque; recarga del teléfono móvil prepago; obtención del listado del uso del bono transporte; enviar remesas de dinero al extranjero; retiro de dinero en efectivo de la cuenta bancaria o tarjeta de crédito; balance de servicios turísticos, planes de pensiones, certificados de residencia o pagos de recibos.
Costes
El uso del cajero automático supone un ahorro para el banco, porque ahorra en personal que no tiene que atender a los clientes para ofrecer servicios básicos. Por este motivo, mucha gente ve abusivo que los bancos cobren una cuota anual por la tarjeta del cajero.