La Semana Santa en Formentera se está desarrollando según las previsiones, sin contratiempos meteorológicos y con una afluencia de ciudadanos acorde con lo que es la isla y con un claro acto de devoción, oración y recogimiento.
El momento más importante hasta ahora fue la procesión del Jueves Santo en Sant Ferran, donde desfiló la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno tras la misa con el lavatorio de pies obligado en estas fechas. Poco después de las nueve de la noche la imagen de Jesús salía a hombros de la iglesia de Sant Ferran y era depositada en unas andas mecánicas para hacer un recorrido a lo largo del pueblo por la calle Major, Guillem de Montgrí, Sant Jaume y Tarragona hasta llegar de nuevo a la iglesia de la que había partido; abrían la comitiva el estandarte, la banda, una imagen del Cristo en la cruz y después, tras el paso, estaban las autoridades y los fieles devotos de la tradición.
Vía Crucis
En el día de ayer se celebraron tres Vía Crucis en las tres parroquias de la isla, a las cinco de la tarde en Sant Francesc, a las siete de la tarde en Sant Ferran y ya entrada la noche en el Pilar de la Mola; aunque la asistencia no fue muy elevada en ninguno de ellos, sí se notó que las costumbres, las tradiciones religiosas no se han perdido por lo que la participación puede decirse que fue elevada para una isla con tan pocos habitantes.
Para mañana domingo a mediodía se espera otro acto importante, la bendición de una nueva imagen en la iglesia de Sant Ferran que permitirá que en lo sucesivo una segunda cofradía desfile cada año en las procesiones de Semana Santa. Tras la bendición, hará su primera procesión siguiendo el mismo recorrido que la del Jueves Santo.
Guillermo Romaní