Vivo en Alemania desde hace 40 años. Ahora he vuelto a Eivissa y he decidido organizar de nuevo la primera gran Volta a Eivissa a Peu, que arranca este jueves, para recordar al padre Morey, que en 1959 era párroco de la iglesia de Santa Creu», cuenta Miguel Hernández, que el 17 de julio de ese año participó en este primer gran acontecimiento social con Josep Lluís Roselló, Joan Marí Tur, los hermanos Antoni y Joan Marí Muñoz, Francisco Romero, Miquel Martín Nieto, Joan Marí Ferrer, Antoni Albert, Marià Serra, Albert Prats, Jaume Bueno, Miquel Cardell, Pedro Guasch Cañas y Víctor Marí Marí. «Este párroco cayó en desgracia por culpa del obispo de la época y le obligaron a abandonar su profesión. Hubo una revuelta social muy grande porque la gente estaba con él que hasta incluso llevó a la fuerza militar a la calle», explica Hernández, quien ha decidido rememorar esta vuelta con motivo de su quincuagésimo aniversario: «La ocasión es fabulosa porque nos ayuda a recordar esos momentos tan puros de la isla. Además 50 años es una cifra muy bonita. No sé si vendrán algunas de las personas que en aquel momento también hicieron la vuelta porque muchos de ellos ya están muy mayores. Para mí va a ser una especie de meditación porque he estado casi 40 años fuera de la isla, aunque siempre he mantenido un vínculo muy especial».
Miguel Àngel Hernández empezará a recordar la vuelta este jueves a partir de las 17'00 horas cuando comience a caminar desde la iglesia de Santa Creu hasta Cala Llonga pasando por Jesús: «Allí paramos en 1959 para tomar una gaseosa. En esta ocasión tomaré licor de palo», cuenta con mucha simpatía. Hernández concluirá la vuelta el próximo 31 de julio.
María José Real