La diputada del PP Carmen Castro pidió ayer la dimisión del conseller insular de Mobilitat, Albert Prats, y del director general d'Obres Públiques del Govern, Antoni Armengol, por no haber sido capaces de solucionar el problema de los drenajes de la autovía al aeropuerto después de más de dos años de gobierno.
Castro criticó que Armengol viniera esta semana a Eivissa para decir que las obras definitivas de evacuación de aguas de la carretera no estarán terminadas esta legislatura. «¿Cómo se atreve a decir esto? Esto es una burla», lamentó la diputada, que defendió que el PP cuando salió del Govern dejó preparado un proyecto de drenaje que contaba «con todas las aprobaciones» y que sólo tenía que comenzarse.
De hecho, Castro recordó que en mayo de 2007, cuando hubo elecciones, las carreteras estaban aún en construcción y el drenaje estaba proyectado, por lo que le correspondía al actual Govern terminar los trabajos. El problema, según la diputada, es que el nuevo Ejecutivo modificó el proyecto y los drenajes.
Auditoría
Este proyecto que habría dejado preparado el PP contaba con el visto bueno de la dirección general de Recursos Hídrics, según reveló Castro, que pidió a los progresistas que «dejen de engañar». «Ni nosotros somos tan malos ni ellos son tan buenos», añadió la diputada, que solicitó al Govern que realice una auditoría del modificado de las autovías para ver si la tramitación ha sido correcta.
«No sé si lo que tienen estos señores es incompetencia o mala fe», criticó Carmen Castro, que sospecha que este retraso se debe a que el Govern lo que quiere es no acabar las obras y mantener vivo el tema de las carreteras para poder seguir criticando al PP.
El portavoz del PP, Joan Pantaleoni, defendió que el proyecto del anterior Govern «podía tener defectos», pero remarcó que el actual Ejecutivo debería haber acabado estos drenajes en dos años. «O es una ineficacia brutal o les interesa mantener la imagen de las inundaciones», remarcó.
Castro criticó que el director general d'Obres Públiques no tiene otro trabajo que las autovías de Eivissa. «¿Este señor qué ha hecho? Sólo una auditoría que ha tenido que convocar cinco veces y que ha hecho y ha rehecho», arremetió la diputada, que también tuvo palabras para Albert Prats: «Ha demostrado que no sabe gestionar las carreteras ni el transporte interislas y tampoco hay dinero para el primer cinturón; y qué decir de la gestión de las depuradoras, sólo hay que salir a la calle y oler». Castro también criticó que Prats tampoco sabe dónde hará la nueva depuradora. «Demostró que sabía ponerse delante de las máquinas y ahora ha demostrado que puede sentarse en un despacho y no hacer nada», añadió la diputada, a la que también molestó una broma que hizo Prats, que invitó a los populares a sorber con una pajita el agua de la autovía. «Que dimita, por el bien de los ciudadanos», remató Castro.
El director general d'Obres Públiques del Govern, Antoni Armengol, se mostró ayer «indignado» con las afirmaciones de los populares porque asegura que cuando llegó al Govern no había ningún proyecto de drenaje hecho y mucho menos aprobado. «Es absolutamente incierto, si es así que me lo demuestren, que pidan una certificación al Govern», aseguró Armengol, que indicó que si se hubiera encontrado un diseño de evacuación de las aguas aprobado lo hubieran construido. «No sé cómo calificarlo porque es una inexactitud tan grande... que lo demuestren, que demuestren que tienen un documento aprobado porque quizás lo tenían y se lo llevaron, y si es así, que devuelvan el expediente al Govern; esto es muy fuerte», añadió el director general, que aseguró que incluso existe un documento por escrito en el que se dice que el tema del drenaje lo resolvería el nuevo equipo de gobierno. «De esto hay constancia por escrito, no se puede engañar a la gente, esto es una barbaridad, un insulto, llevamos dos años trabajando seriamente para proyectar este drenaje», añadió Armengol, que se mostró muy descontento con el tono de Castro. «No entiendo por qué me tiene que insultar de esta forma y con este tono despectivo. Se puede criticar, pero no descalificar», añadió.
El conseller insular de Mobilitat, Albert Prats, también aseguró en declaraciones a Radio Ibiza Ser que lo dicho por el PP era mentira y que esto sólo demuestra la «catadura moral» de sus integrantes.