La Conselleria balear de Medi Ambient publicó ayer en el Butlletí Oficial la adjudicación de las obras de remodelación previstas para las desaladoras de Eivissa y Sant Antoni, por un total de 26,1 millones de euros a la empresa española Concesionaria de desalación de Ibiza S.A.
El contrato incluye la redacción de proyectos y ejecución de las correspondientes obras de reforma para las dos instalaciones por un término de quince años. El presupuesto de licitación fue inicialmente de 26,7 millones de euros, por lo que los trabajos supondrán unos 600.000 euros menos de coste, debido a la propuesta a la baja presentada por la empresa.
La reformas de ambas desaladoras forma parte del proyecto de interconexión entre las instalaciones y la futura desaladora que tiene previsto construirse en Santa Eulària a fin de llevar agua desalada a toda la isla.
Las obras de interconexión se iniciaron el pasado mes de junio y durarán 17 meses, por lo que se prevé que la red de agua desalada alcance a todos los núcleos del interior y de la costa de Eivissa en octubre de 2010. Es un proyecto que lleva a cabo el Ministerio de Medio Ambiente y la Conselleria de Medi Ambient y que tiene un presupuesto de 10,3 millones de euros.