La falta de acuerdo en el propio Govern ha retrasado la aprobación del proyecto de presupuestos para el próximo ejercicio. La intención del conseller d'Hisenda, Carles Manera, era que las cuentas del próximo ejercicio se aprobasen en el Consell de Govern celebrado ayer, pero distintos consellers socialistas exigieron más tiempo para poder consensuar los recortes presupuestarios por culpa de la crisis. A partir de ahora, el Ejecutivo gana tiempo ya que la intención es que los presupuestos sean aprobados el Consell de Govern el miércoles o en la habitual reunión de los viernes.
Distintos consellers del Govern plantearon a Manera que era necesario revisar los presupuestos del próximo ejercicio. Algunos departamentos sufren recortes del 15 por ciento en relación al actual ejercicio, pero el principal problema se produce en Educació y Sanitat.
Educació baja un 4,5%
En la Conselleria d'Educació, el recorte previsto en las cuentas del próximo ejercicio es del 4,5 por ciento, un porcentaje que el nuevo conseller, Bartomeu Llinàs, considera que no puede asumir para llevar adelante la política de su departamento para el próximo ejercicio. Precisamente, Bárbara Galmés, consellera d'Educació hasta hace un mes, se quejó de la falta de presupuesto para poder impulsar la construcción de nuevos centros escolares. La misma situación se produce en Sanitat, donde el recorte previsto en los presupuestos ha provocado la protesta del conseller Vicenç Thomàs, según confirmaron a este diario fuentes del propio Govern.